El oído es un sistema extremadamente complejo, el
primero de los cinco sentidos que se desarrolla en el feto y el que permite el
primer contacto con el mundo.
El oído capta los sonidos, los convierte en
impulsos eléctricos y los transmite a través de fibras nerviosas al cerebro,
que los lee e interpreta. Para entender mejor este proceso, imaginemos que
entramos en este órgano y "visitamos" sus partes.
Oído externo
Comprende el pabellón auricular, comúnmente
denominado "oreja" (que ayuda a establecer de dónde procede un
sonido), el canal auditivo y la delgada membrana del tímpano. Cuando los
sonidos llegan a la membrana, ésta los convierte en vibraciones que se
transmiten al oído medio.
Oído medio
En apenas un centímetro cuadrado, el oído medio
contiene los tres huesecillos más pequeños del cuerpo humano: el martillo, el
yunque y el estribo. Los movimientos provocados por el tímpano se amplifican
veinte veces para transmitir al oído interno tanto un sonido prácticamente
imperceptible como el de toda una orquesta.
Oído interno
En una pequeña estructura llamada cóclea o
caracol hay veinte mil células ciliadas, algunas de las cuales procesan los
sonidos fuertes y otras los débiles. Las células ciliadas convierten las
vibraciones en impulsos eléctricos que, a través de las delgadas fibras del
nervio acústico, llegan al cerebro, donde determinan la sensación auditiva.
Hola Carola, me parece muy interesante tu Blogrssss
ResponderEliminarMuy útil el Blog... una consulta... el hecho de hacer recurrentemente tapones de serumen tiene algún significado clínico ???
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